A todos nos ha pasado que cuando buscamos botas de esquí nos enfretamos al término FLEX, que junto a la talla y la horma son los parámetros fundamentales para lograr el perfecto calce.
En palabras simples, el famoso Flex nos indica la resistencia que opone la bota a la flexión del tobillo (Movimiento co-protagonista de la posición base en el esquí) Es decir, a mayor Flex mayor rigidez de la bota.
Un mayor Flex determinará una mayor capacidad de respuesta ante la transmisión de la carga ejercida. Si ponemos de ejemplo a un esquiador experto, este buscará un mejor rendimiento con un mayor Flex incrementando la potencia y precisión bajo sus pies, mientras que un esquiador principiante buscará mayor adaptación y comodidad con un menor Flex.
En el mercado podemos observar ligeras diferencias en botas con el mismo Flex dependiendo de la marca o categoría de esquí como el esquí de travesía versus el esquí de pista donde ante el mismo Flex el primero tenderá a ser ligeramente más blando.
Grados de Flex:
- Flex bajo (50-80) : Botas más blandas, fáciles de flexionar. Ideales para principiantes porque son más cómodas y perdonan errores.
- Flex medio (90-110) : Botas con más soporte, adecuadas para esquiadores intermedios o quienes buscan mejor rendimiento.
- Flex alto (120-130 o más) : Botas rígidas, pensadas para esquiadores avanzados o expertos. Dan mayor precisión y control, pero requieren técnica y fuerza.
Factores a considerar para escoger el Flex:
- Sexo: Hombres y mujeres tienen diferencias anatómicas y biomecánicas específicas que pueden hacer que para las mujeres elegir el Flex de sus botas de esquí se inclinen hacia uno menor que el de su equivalente hombre. Sin embargo las mujeres más altas, más pesadas o con mayor fuerza muscular pueden requerir un mayor Flex similar al de su par.
- Nivel de esquí: Más avanzado, Flex más alto. Sobre estimar tu nivel de esquí puede terminar generando accidentes o lesiones completamente evitables.
- Peso y fuerza: Personas más pesadas o fuertes necesitan un Flex más alto.
- Estilo: Si te gusta ir rápido, hacer freeride o carving agresivo, necesitarás más rigidez.
Variaciones del Flex:
- Temperatura: los plásticos con los que se fabrican las botas son sensibles a los cambios de temperatura y se vuelven más rígidos con el frío. Así que ten cuidado al probártelas en la tienda ya que, por lo general, las botas serán mas blandas allí que en la pista.
- La rigidez de las hebillas, especialmente las que están en el cuello y en la correa de la bota, influyen en la dureza de las botas.
- La antigüedad de las botas: con el paso del tiempo, el plástico se va reblandeciendo y eso afecta a la flexión de las botas.
Como vemos el Flex es un gran factor a considerar al momento de escoger botas. Sin embargo existen otros factores importantes para tomar en cuenta antes de que la travesía de escoger botas se convierta en una tortura.
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